Bloquear el proyecto de Samuel García generó un efecto carambola en el bloque de contención senatorial; ahora MC analizará sus alianzas en votaciones legislativas.
Carina García
@carinagt
Tras lo ocurrido el fin de semana en Nuevo León, en que quedó trunca la carrera presidencial del gobernador Samuel García, Movimiento Ciudadano se convirtió en la bisagra en el Senado, y en los próximos días ese grupo se perfila para convertirse en el fiel de la balanza de las votaciones clave; “haremos valer nuestros votos”, anticipa el dirigente Dante Delgado.
Así, los 13 senadores de MC serán decisivos en la aprobación de nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la próxima semana, e incluso en las designaciones pendientes para cinco magistrados de Salas Regionales del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, sobre todo las dos prioritarias para ese partido, con cabecera en las dos entidades que gobierna: Guadalajara, Jalisco y en Monterrey, Nuevo León.
Así se cumplió el amago de Delgado, el pasado lunes, en que tras el affaire regio declaró: “muy pronto van a saber lo que es meterse con Movimiento Ciudadano”; ayer agregó: “ya nos empiezan a conocer” al anunciar la muerte del bloque de contención que durante casi cinco años integraron los opositores en el Senado.
El partido naranja será bisagra, pues para proceder a la elección de esos cargos judiciales –entre otros futuros– el Senado requiere mayoría calificada de los senadores presentes, así que Morena y sus aliados, que juntos suman 75, requieren forzosamente del apoyo de una bancada de oposición para tener de 83 a 86 votos, según el número de senadores presentes en el pleno.
Ese número mágico solamente puede conseguirlo con aval de Acción Nacional (PAN) –su adversario número uno– o de Movimiento Ciudadano.
Del resto de los grupos parlamentarios oponentes, ni siquiera el Revolucionario Institucional (PRI), reducido a 10 integrantes, sería suficiente para que Morena y aliados alcanzaran mayoría calificada, a menos de que contara con senadores expriístas declarados ahora sin partido.
Así, aunque no varió el número de opositores, el Senado se vio impactado por el enredo en Nuevo León, suscitado por la decisión del gobernador García de pedir licencia pero inconformarse con el nombramiento del interino hecho por el Congreso, litigar el caso y, por último, decidir quedarse en la entidad ya sin posibilidad de ser precandidato presidencial.
El “nuevo” MC
Para el coordinador de los senadores de MC, Clemente Castañeda, si bien “algo cambió en el panorama nacional” tras los sucesos de Nuevo León, eso no quiere decir que su partido deje de ser oposición a Morena y ahora busque negociar con ese partido.
Pero ahora será “difícil” llegar a acuerdos con la oposición en el Senado, admite. El pasado martes en Junta de Coordinación Política (Jucopo) el PAN y el PRI aseguraron que votarán en contra de la segunda terna de candidatas a ministras de la SCJN, “los naranjas no dijeron nada”, confirmaron fuentes legislativas.
Sobre la Corte –explica Castañeda– “no tenemos un acuerdo todavía” pues a su juicio la circunstancia ha cambiado con relación a la primera terna de propuestas a la Corte, que incluyó a Bertha María Alcalde, Lenia Batres y María Estela Ríos, misma que tuvo el voto en contra de todo el bloque opositor, incluido MC.
Ahora, advierte el senador naranja, aunque sólo se sustituyó a Ríos por Eréndira Cruzvillegas, la situación “ya es otra”.
No es que se valore apoyar a Morena, explica, sino que el dilema es que el Senado ejerza su facultad de elegir ministra, o dejar que el presidente Andrés Manuel López Obrador la nombre.
Sin embargo, para fines prácticos la decisión de no dejar al Ejecutivo la decisión final implicaría votar junto al partido guinda.
“Existe una circunstancia distinta a lo que vivimos la semana pasada. El Senado de la República debe decidir entre elegir a quien más convenga o darle la prerrogativa para que sea el propio Presidente de la República quien decida. Lo vamos a analizar”, plantea el político jalisciense.
“No es exagerado decir que lo que ha ocurrido el fin de semana cambia el clima político del país, Movimiento Ciudadano se siente agraviado por lo que ocurrió” y ahora entrará en una reflexión de su nuevo papel, reconoce Castañeda.
Ya ubicado en esa nueva posición, dice que aunque hay buena opinión en el caso de Alcalde “es inocultable que proviene como las demás de un origen político”. Pero de ella y las demás “hay méritos, historia, trayectoria y por tanto hay luces y sombras”.
Sin embargo, también es probable que MC apoye su propia propuesta, sin inclinarse ni con Morena, ni por el bloque opositor. Pero esa postura a medias dividirá la fuerza opositora.
Así lo hizo este miércoles 6 de diciembre al votar perfiles para comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) pues respaldó a Ángeles Guzmán y a Marina San MartÍn –las mejor evaluadas- y esta última además de los 13 votos de MC tuvo 37 votos de otros partidos.
En MC “ya no tenemos nada que hacer en términos de construir alianzas” en el Senado, tercia la senadora Patricia Mercado.
“No estamos haciéndolo con mezquindad sino porque el PRIAN truncó un proyecto político de nuestro candidato Samuel García” y aunque reconoce que al Congreso local correspondía la decisión sobre el interinato, “no tenía por qué proponer adversarios”, critica la legisladora.
De acuerdo con la senadora emecista con Morena no hay ningún acuerdo pero “vamos vez por vez, caso por caso, puede haber adhesiones frente a una causa, un problema” e ir con el bloque de contención, pero ya no como antes.
Muere el bloque de contención
Después de las elecciones de 2018 y durante la 64 y 65 Legislaturas y con el fin de frenar a la mayoría que construyeron Morena y sus aliados, se creó el bloque de contención, que aglutinó a senadores opositores.
Juntos impidieron la votación de mayoría calificada necesaria para que prosperaran, hasta 2022, reformas constitucionales consideradas regresivas. La racha se rompió cuando a fines del año pasado senadores priístas avalaron ampliar la militarización de la Guardia Nacional hasta 2028.
Mientras estuvieron unidos, los senadores de oposición interpusieron un cúmulo de acciones de inconstitucionalidad y recursos legales para oponerse a reformas de la cuarta transformación, entre otras, el Plan B de reforma electoral y la extinción de fideicomisos del Poder Judicial.
A decir de Delgado Rannauro, tras lo ocurrido en Nuevo León “pueden seguir siendo bloque de oposición, pero bloque de contención (con MC) está muerto, ya no hay manera”.
FUENTE: politica.expansion