Se prevé que la ley traerá entre 500 y 2.000 nuevos emisores en los próximos años.
Fecha de publicación: 13/06/2023
Antes de que concluyera el período de sesiones el pasado 30 de abril, la Cámara de Senadores del Congreso de México aprobó el texto final de lo que será, una vez revisado y aprobado por Diputados, la nueva Ley del Mercado de Valores, un texto legal que, junto a la conexa Ley de Fondos de Inversión, pretende dar un nuevo aire al mercado local de capitales.
La ley busca ampliar el universo de emisores con la idea de elevar su nivel de participación en el financiamiento del sector empresarial mexicano, de su actual 36 % del Producto Interno Bruto. Para ello se espera simplificar los procesos de emisión de acciones o bonos, a fin de atraer a nuevos emisores, entre 500 y 2.000 actores inéditos en los próximos tres años, según estima la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles (AMIB).
Bernardo Reyes Retana, socio de Gonzalez Calvillo y uno de los dos abogados externos que participaron en las mesas de discusión para la elaboración y presentación de la iniciativa de reforma, y Vicente Anaya, asociado de Chávez Vargas Minutti, ofrecen sus consideraciones sobre el contenido de este nuevo texto legal que deberá entrar en vigencia el próximo año.
¿Cuáles son los principales cambios que introduce la propuesta de Ley del Mercado de Valores?
Bernardo Reyes Retana: Los cambios más relevantes, en mi opinión, son:
- La creación de un régimen simplificado para ofertas públicas de valores (tanto de capital, como de deuda), dirigido a inversionistas calificados e institucionales.
- Mayor flexibilidad en las reglas de gobierno corporativo y restricciones para emisión de distintos tipos de acciones para las Sociedades Anónimas Bursátiles o SABs (ej. elimina autorizaciones especiales y límites para emisión de acciones con distintos derechos o derechos limitados, facultades delegadas por parte de la Asamblea de Accionistas al Consejo de Administración para la asignación de acciones ante aumentos de capital social, poison pills, elimina requisito de cambio de modalidad para las Sociedades Anónimas Promotoras de Inversión Bursátil o SAPIBs).
- Introducción de disposiciones en materia de ESG (sostenibilidad y equidad de género).
- Modificaciones a requisitos y reglas aplicables a los asesores en inversiones que sean personas morales.
- Incremento de responsabilidades y sanciones para las emisoras, bolsas de valores, casas de bolsa y otros asesores de las operaciones (auditores externos y abogados), al tener como línea fundamental el favorecimiento de un régimen de revelación de los participantes privados versus un régimen de escrutinio y supervisión plena por parte del regulador.
Vicente Anaya: El cambio más relevante, en mi opinión, es la inclusión de las emisoras simplificadas, ya que es un proceso innovador en el sentido de que la autoridad otorgará un voto de confianza en favor de las casas de bolsa y las bolsas de valores para que ayuden a las emisoras simplificadas a llegar al mercado bursátil.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), como autoridad, tendrá menos carga administrativa en cuanto a trámites se refiere para introducir a estos nuevos participantes, lo que permitirá un acceso más sencillo al mercado bursátil mexicano.
¿Cómo beneficia la reforma al mercado de valores?
Vicente Anaya: La ley promoverá una gran sinergia entre los participantes del mercado de valores con la autoridad para hacer un proceso de autorización y listado más eficiente frente a nuevos participantes en el mercado.
Para las Sociedades Anónimas Bursátiles y las Sociedades Anónimas Promotoras de Inversión Bursátil promueve un mejor funcionamiento de cumplimiento de su gobierno corporativo, porque la toma de ciertas decisiones será más sencilla y expedita, por ejemplo, la emisión de acciones y votaciones para evitar el cambio de control.
Adicionalmente, se otorga a dichas sociedades la posibilidad de emitir acciones con derechos diferenciados para garantizar el mantenimiento de control. Esto es de suma importancia, pues “cura en salud” a dichas sociedades, ya que recordemos que existe la preocupación de las empresas públicas en participar en el mercado accionario, pues temen perder el control de sus sociedades en un futuro. Esto, evidentemente, trata de revivir el mercado accionario en México.
¿Hay alguna afectación para el mercado con estos cambios?
Vicente Anaya: Veo una afectación con respecto a la limitación del perfil del inversionista que puede participar en el mercado, al menos desde el punto de vista de los valores colocados, pues sigue siendo un club selecto para ciertas empresas y personas que pueden adquirir dichos valores.
Pienso que el perfil del inversionista tuvo que ampliarse para poder diversificar la participación en el mercado.
¿Quiénes resultan más favorecidos con estos cambios?
Bernardo Reyes Retana: La propuesta de iniciativa de reforma contiene elementos que buscan beneficiar a la totalidad de los participantes del mercado de valores. Sin duda, considero que las emisoras y los inversionistas se verán beneficiados con la operación de procesos simplificados para llevar a cabo ofertas públicas de valores de manera eficiente, lo que no ocurre hoy debido a los procesos de autorización requeridos en la actual ley y disposiciones secundarias.
Sin embargo, diría que los beneficios llegan a los demás involucrados en estas operaciones: las casas de bolsa, auditores externos, asesores legales, agencias calificadoras, administradores primarios y maestros, entre otros, se podrán ver beneficiados ante un aumento de operaciones de esta naturaleza.
¿Cuál es el aporte de la Ley de Fondos de Inversión al mercado?
Bernardo Reyes Retana: La intención básica es la existencia de fondos de cobertura que existen en otras jurisdicciones y mercados, conocidos como “hedge funds”.
¿Qué función cumplen estos fondos? ¿Cómo benefician al sector?
Vicente Anaya: La función primordial es ampliar las inversiones, pues normalmente buscan activos de inversión en mercados alternativos o públicos, porque su composición de cartera es más flexible que los fondos tradicionales.
El principal objetivo será atraer a los inversionistas patrimoniales e institucionales.
El funcionamiento de estos fondos es interesante, pues llevan detrás ciertos tipos de activos de inversión, un poco más agresivos de lo habitual, con un margen de ganancia mayor que los fondos habituales.
Si bien es cierto que esta introducción es algo innovadora y de mayor riesgo, el reto real estará en cómo la autoridad logrará implementar los procesos de autorización y regulación de los fondos de cobertura y cómo estos implementarán sus estrategias para atraer inversionistas y generar confianza.
¿Cree que estos cambios se adaptan a la realidad del mercado mexicano actual?
Bernardo Reyes Retana: La reforma es un buen esfuerzo para rescatar el mercado bursátil mexicano, que en los últimos años ha enfrentado relevantes complejidades en procesos y tiempos de autorización. Sin duda, dicha reforma es muy mejorable y su éxito dependerá del contenido y procesos detallados en los que deberá trabajar la CNBV, mediante las disposiciones de carácter general o secundarias.
¿Cambiaría algo al texto aprobado por el Senado?
Bernardo Reyes Retana: Dos puntos que considero no ayudarán a un éxito pleno de dicha reforma y que buscaría acotar o cambiar en el proyecto aprobado por la Cámara de Senadores son:
- Que se pretende limitar a nuevas emisoras (“emisoras simplificadas”) y no abrir este nuevo régimen a todo tipo de emisoras (pequeñas, medianas o grandes).
- Establecer un límite en el monto de las ofertas públicas simplificadas que una emisora pueda realizar dentro de un tiempo determinado.
Creo que ambas medidas restringirían de forma importante este mercado, teniendo como consecuencia impedimentos para un desarrollo pleno y, naturalmente, aumentarán los costos para la implementación de este tipo de operaciones, cuando la intención de la administración federal en este esfuerzo es crear un mercado más eficiente, dinámico y accesible para nuevas emisoras.
¿Agregaría algo a la reforma aprobada?
Vicente Anaya: Considero importante crear medidas y facilidades en los procesos actuales para consentir y apoyar a las emisoras activas, con el fin de mantenerlos interesados en seguir en el mercado bursátil. No olvidemos que, últimamente, han existido sociedades que ya desean participar en el mercado bursátil mexicano y, lamentablemente, han buscado su salida (casos de Banco Santander México, Grupo Lala, IEnova, Rassini, Bioppapel y Maxcom, entre las 17 que han dejado de cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores en los últimos años).
FUENTE: lexlatin