(CNN Español) — El pleno de la Cámara de Senadores de México aprobó el “Plan B” de la reforma electoral impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El proyecto obtuvo luz verde en el recinto a pesar del voto en contra del senador y líder de la bancada del partido oficialista Morena, Ricardo Monreal, bajo el argumento de que varios artículos incluidos en este proyecto violan la Constitución.
Con 69 votos a favor y 53 en contra, y tras una maratónica sesión que se extendió por casi 20 horas, la reforma fue avalada con las modificaciones aceptadas al dictamen e incluye, entre otros puntos, la reducción del Servicio Profesional Electoral, la fusión de la estructura del Instituto Nacional Electoral (INE) y una polémica cláusula que garantiza a los partidos aliados el reparto de votos para conservar su registro.
“Aclaro que es un asunto estrictamente personal y no involucra al grupo parlamentario en el que participo. Es un asunto que me mueve a asumirlo con toda integridad y responsabilidad, incluyendo los desenlaces, las consecuencias de lo que ello resulte”, dijo Monreal antes de anunciar su voto en contra.
El presidente López Obrador negó el jueves que haya represalias planeadas contra Monreal por este voto en contra.
«No hace falta que ninguna autoridad, ni un dirigente, diría que ninguna instancia de disciplina de un partido decida sobre el comportamiento de un militante, de un ciudadano, porque existe un tribunal popular, ya la gente está más que consciente», dijo el mandatario durante su conferencia diaria en respuesta a un periodista.
La reforma electoral será ahora devuelta a la Cámara de Diputados para su trámite correspondiente, y se espera su aprobación en las próximas horas a través del mecanismo fast track, toda vez que el período ordinario de sesiones concluye este jueves.
Según un análisis emitido por los 11 consejeros del Instituto Nacional Electoral, este plan alternativo del Ejecutivo Federal elimina la estructura permanente subdelegacional del INE y disminuye al mínimo el Servicio Profesional Electoral, lo que pondría en riesgo la eficacia y eficiencia en el desarrollo de los procesos electorales y la atención en los módulos donde se realiza el trámite de la credencial para votar.
Según el cálculo de los consejeros del INE, la iniciativa contempla eliminar cerca del 84,6 del Servicio Profesional Electoral, que equivale al 84,6% de las plazas.
La oposición asegura que este proyecto modifica las leyes electorales antes de un proceso electoral.
Este «Plan B» llega luego de que el oficialismo no contara con una mayoría calificada de al menos dos tercios en la Cámara de Diputados y Senadores (334 votos), para aprobar una reforma constitucional en materia electoral. La oposición ha dicho que, al modificar las leyes secundarias, se busca disminuir la autoridad y estructura del Instituto Nacional Electoral (INE).
A menos de dos años de que se celebre la elección presidencial de 2024, López Obrador ha argumentado que su iniciativa responde a la demanda de los ciudadanos de una política de austeridad y de crear órganos electorales que garanticen comicios legítimos, sin la posibilidad de que haya fraude.
La propuesta original de reforma constitucional en materia electoral, enviada por el Ejecutivo federal en abril al Congreso, establece modificaciones en 18 artículos constitucionales y siete artículos transitorios, entre los que destaca la desaparición del Instituto Nacional Electoral (INE), órgano encargado de organizar las elecciones en México, y sustituirlo por el llamado Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC).
La oposición ha dicho que impugnarán este “Plan B” de reforma electoral ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para revertirla.
“Tengan la plena seguridad de que vamos a acudir a todas las instancias políticas, legales y constitucionales para combatir esta reforma destructiva”, advirtió el senador independiente Emilio Álvarez Icaza en un video en Twitter.
FUENTE: cnnespanol