Especialistas señalan que en este año las autoridades deben atender la problemática de la pesca ilegal al expandir el sistema de monitoreo satelital de embarcaciones y aprobar normas pendientes.
En un año Estados Unidos evaluará a México sobre sus medidas para la conservación de la vaquita marina y, de no cumplir las expectativas como reducir la pesca y el comercio ilegal de totoaba, se contemplan sanciones comerciales, como embargar productos pesqueros.
Ambas especies son endémicas de México, es decir, exclusivas del Alto Golfo de California, y están en peligro de extinción porque la vaquita marina se enreda y muere en las redes de pesca ilegales utilizadas para capturar totoaba, un pez codiciado en China por su vejiga natatoria o buche.
La evaluación se estableció en una carta enviada por el presidente Joe Biden, que el Gobierno de México interpretó como un reconocimiento, pero en realidad señaló carencias que persisten para proteger a la vaquita marina y notificó que el país no ha detenido la pesca y el comercio ilegal de totoaba, certificación que habían demandado organizaciones estadounidenses.
“Estos pasos son importantes, pero insuficientes para asegurar la recuperación de la vaquita”, señala la carta con fecha del 17 de julio que Biden envió al Congreso de Estados Unidos.
Especialistas consultados por El Sabueso señalan que en este plazo de un año las autoridades mexicanas deben atender la problemática de la pesca ilegal.
Para ello, es necesario tomar acciones como expandir el sistema de monitoreo satelital de embarcaciones pesqueras y aprobar la Norma Oficial Mexicana de Trazabilidad, que acumula dos años congelada.
También coinciden en que hay que optar por la cooperación entre ambos países y no sólo las sanciones de Estados Unidos a México. Sin embargo, consideran que las presiones estadounidenses han obligado a las autoridades mexicanas a tomar medidas.
El Sabueso te explica por qué Estados Unidos amenaza con sancionar a México, por qué los embargos no son medidas óptimas para combatir la pesca ilegal de totoaba y qué debería priorizar el país para proteger a la vaquita marina.
¿Cómo y por qué Estados Unidos podría sancionar a México?
La carta de Joe Biden es una notificación al Congreso de Estados Unidos de que el 18 de mayo de 2023, el Secretario del Interior certificó que México está participando ilegalmente en el comercio de totoaba y la captura de vaquita.
Desde junio de 2020, las organizaciones estadounidenses Centro para la Diversidad Biológica y el Instituto de Bienestar Animal iniciaron una queja de demanda contra el Departamento del Interior de Estados Unidos para que no tarde más en la respuesta a una petición para “certificar a México como un país que falla constantemente en detener la pesca y el comercio ilegales de la totoaba”.
“Esta carta constituye mi notificación al Congreso de conformidad con la subsección (b) de la Enmienda Pelly”, dice la carta de Biden, argumentada con base en la Ley de Protección del Pescador.
Si un país está certificado bajo esta ley, el presidente de Estados Unidos puede embargar cualquier producto pesquero de esa nación.
La demanda también argumentó que el comercio de totoaba está prohibido bajo la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies en Peligro de Extinción de Fauna y Flora Silvestres. La CITES, por sus siglas en inglés, recomendó a los países miembros suspender todo el comercio con México de especies incluidas en sus apéndices, como la totoaba y la vaquita marina (las dos aparecen desde la década de 1970 de acuerdo con la carta de Biden).
Pero la recomendación fue retirada cuando la CITES aprobó el Plan de Acción para prevenir la pesca y comercio ilegal de totoaba y proteger a la vaquita marina, presentado por el Gobierno de México en abril de 2023 y citado en la carta de Joe Biden.
A más tardar en julio de 2024, la Secretaría del Interior, en coordinación con la Secretaría de Comercio, la Secretaría de Estado y el representante Comercial de Estados Unidos evaluarán a México sobre la implementación de dicho plan de acción.
“El informe se utilizará como base para evaluar si serán necesarias medidas adicionales, incluidas posibles restricciones comerciales”, advirtió Biden sobre la facultad del secretario del Tesoro
Regular antes que sancionar
El Centro para la Diversidad Biológica y el Instituto de Bienestar Animal, organizaciones que demandaron a Estados Unidos, lamentaron la decisión del presidente Joe Biden de posponer por un año las sanciones comerciales contra México.
Sin embargo Oceana considera que esto es positivo, porque las sanciones perjudicarían especialmente a las y los pescadores legales, y no garantizan la conservación de la vaquita marina.
“El embargo, desde nuestra visión, no ayuda a la protección de vaquita y simplemente afecta. El costo social y económico es altísimo frente al posible avance que pueda tener”, señala en entrevista Renata Terrazas, directora ejecutiva de Oceana en México.
La organización dedicada a la protección de los océanos propone que las autoridades expandan el sistema de monitoreo satelital de embarcaciones pesqueras para saber quién pesca, dónde y cómo, y que aprueben la Norma Oficial Mexicana de Trazabilidad, la cual lleva más de dos años detenida.
Esta norma servirá para ordenar los productos pesqueros y acuícolas, desde su extracción hasta los procesos de comercialización y consumo. Entre sus alcances también está el combate a la pesca ilegal por tomar en cuenta las prácticas de pesca y movilización fuera de la Ley General de Pesca y Acuacultura Sustentables.
“No hemos entendido bien cómo recuperar a la vaquita marina y no hemos reducido la pesca ilegal. Y mientras no logremos hacer eso, no vamos a poder tener las noticias que quisiéramos, que es que ya no esté en peligro de extinción”, advierte Terrazas.
Un año de cooperación por la vaquita marina
En México quedan mínimo de 10 a 13 vaquitas marinas y entre una y dos crías, según estimaciones de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) con 76% de probabilidad.
En el Crucero de Observación Vaquita 2023, que se llevó a cabo del 10 al 27 de mayo, se registraron 61 detecciones acústicas y 16 avistamientos. Las cifras son mayores con respecto a 2021, cuando las detecciones fueron 26, los avistamientos ocho y había ocho ejemplares de este mamífero.
Que haya más vaquitas marinas que hace dos años significa que la especie está recuperándose, pero sigue en peligro de extinción.
Gerardo Ceballos, investigador del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), destaca que la vaquita marina sigue reproduciéndose pero insiste en reforzar la Zona de Tolerancia Cero (ZTC), es decir, donde no entran embarcaciones.
En su carta Biden ordenó mantener un diálogo de alto nivel con el Gobierno de México de al menos reuniones trimestrales y brindar capacitación para la evaluación en julio de 2024.
“No estoy ordenando al secretario del Tesoro que imponga medidas comerciales a los productos mexicanos por las actividades que dieron lugar a la certificación del Secretario del Interior en este momento, porque las acciones descritas anteriormente son los medios adecuados para abordar esta cuestión”, se lee en la carta.
Sin embargo, para Ceballos, experto en especies en peligro de extinción, México debería plantear la colaboración con Estados Unidos para la reducción de la pesca ilegal.
“A pesar de que hay muchas presiones, son legítimas. Estados Unidos ha forzado a las autoridades a tomar medidas más sólidas en términos de la conservación de la vaquita, me parece que es muy bueno en el tema de dar una cláusula”, señala.
Renata Terrazas, directora ejecutiva de Oceana en México, también insiste en que en este plazo las autoridades deben atender la problemática de la pesca ilegal.
“Es importantísimo que se involucren con la pesca en este tema porque al final del día, pues una de las mayores presiones de la vaquita marina es la pesca ilegal, y ojalá México y las autoridades mexicanas no se duerman en laureles y piensen que va a pasar un año que puedan librar sin hacer nada genuinamente”, afirma.
FUENTE: animalpolitico