Los cruces masivos de migrantes por el río Bravo hacia Estados Unidos cesaron, pero los militares continúan extendiendo la malla de púas a lo largo del río Grande.
Por Redacción Noticias Telemundo
El Título 42 expiró justo antes de la medianoche del jueves (hora del Este), pero la frontera con México sigue blindada con vallas de púas y militares para frenar a los miles de inmigrantes que siguen aguardando para cruzar. El Gobierno de Joe Biden activó además nuevas medidas para expulsar lo más rápido posible a quienes no califiquen para el asilo. Le contamos con nuestros corresponsales lo que ocurre a ambos lados de la frontera, en Washington D.C. y en Centroamérica.
La frontera norte de México, en relativa calma tras el final del Título 42
La crisis que se desató en las últimas horas del Título 42 ha terminado por el momento, según reportes de agencias desde el terreno. Este viernes los cruces masivos de migrantes por el río Bravo hacia Estados Unidos cesaron, aunque los militares de ese país continúan extendiendo la malla de púas a lo largo del río Grande.
A diferencia de los días anteriores en que miles de personas se lanzaban al caudal a pesar del riesgo, para el viernes en la noche los puntos por donde se filtraban permanecían solos y sin intentos por parte de los suramericanos, centroamericanos y mexicanos que siguen llegando a Matamoros, Tamaulipas, en el norte de México.
En cambio, un grupo de 50 niños y adultos, todos con cita, ingresaron a Estados Unidos de manera legal: hicieron fila afuera del Instituto Nacional de Migración (INM) para ser conducidos hasta por el Puente Nuevo, parte de la estrategia de las autoridades de ambos países para dar respuesta ágil a la demanda de asilo.
“Es población migrante que se encontraba en Matamoros desde hace algunas semanas y presentan un rango de vulnerabilidad conforme a los estipulado bajo el Título 8. Seguimos invitando que las personas busquen cualquiera de las opciones de forma legal y segura”, le dijo a la agencia EFE el encargado de la Casa del Migrante ‘San Juan Diego’, José Luis Elías Rodríguez.
“Esperar la cita es muy duro estar aquí. Por mi cabeza pasan muchas cosas”, dijo el migrante Ángel Darío.
Con esta medida se pretende medir la capacidad del personal de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) para gestionar los casos, con la probabilidad de que incremente la asistencia y con ello el flujo sea mayor.
“Si CBP ve que tiene capacidad para más, ellos nos van a decir 60 o 70, pero ahorita quieren ellos arrancar con 50. Eso es lo que tenemos que transmitir a todos los migrantes, que se les va dar asilo político por parte de Estados Unidos”, informó el alcalde de Matamoros, Mario Alberto López Hernández.
Aunque las estampidas por el bordo del río Bravo han desaparecido, militares de Estados Unidos continúan limpiando la zona y acrecentando la cerca de alambre por varios kilómetros, sin descuidar la vigilancia constante a pie o en camionetas.
Los aspirantes caminaban de un lado a otro, algunos sentados por la zona en grupos pequeños, solo contemplando las maniobras. Pero ya no estaba la alternativa de llegar suelo norteamericano como al final del Título 42.
FUENTE: telemundo.com