La violencia contra los animales no cesa, por ello, una especialista analiza los tipos de maltrato, así como las leyes que protegen a estos seres sin voz.
Cada vez se exponen más los casos de maltrato animal gracias a las redes sociales.
Los perros son los que mayormente están involucrados en situaciones de daño. Desde los que viven encadenados en la azotea de los domicilios hasta los que son utilizados para peleas clandestinas, la violencia contra los «peludos» parece ir en aumento.
Del total de reportes de maltrato animal atendidos hasta el año pasado, el 87% de ellos estaba relacionado con canes, según datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México. Entre los motivos de denuncia se encontraron falta de alimento, agresiones físicas, mantenerlos amarrados y abandono.
El maltrato animal se define como un comportamiento irracional de una persona hacia un ejemplar con el fin de causarle sufrimiento, estrés o, incluso, llevarlo a la muerte. «Se puede ejercer a través de varias modalidades.
Antes, solo estaba estipulado el daño físico, como golpes o quemaduras; pero actualmente hay otras conductas que también se castigan, entre ellas, la omisión de cuidados, dejarlos en la azotea o no llevarlos al veterinario si tienen alguna herida o problema de salud que les ocasione la muerte.
«La violencia psicológica contempla asustarlos, amenazarlos con golpearlos o aventarlos por la ventana, aislarlos por mucho tiempo o mostrarles cosas que les den miedo. Hoy, para todo esto existe un castigo«, menciona Beatriz Vanda Cantón, académica de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Además de estas conductas, también se incluye estimularlos con instrumentos que les causen dolor, no permitirles un descanso adecuado o hacerlos consumir algún tipo de droga. Incluso, dejarlos encerrados en el auto bajo altas temperaturas se considera maltrato, ya que bastan unos minutos para que tengan un golpe de calor. Lo mismo sucede cuando se saca a pasearlos con el asfalto muy caliente.
Las leyes a su rescate
Si bien la legislación mexicana no reconoce a los animales como sujetos de derechos, sí existen normas para protegerlos, garantizar su bienestar y prohibir el maltrato en sus distintas clasificaciones. La mayoría de las entidades federativas de nuestro país tipifican la violencia hacia ellos como un delito.
«A raíz de que en 2017 se promulgó la Constitución Política de la Ciudad de México, hubo cambios importantes en las leyes de protección hacia los animales, además de que se modificaron los códigos penales.
«Hoy en día, la sanción más grave es la cárcel. Puede haber hasta cinco años de castigo si la víctima muere por consecuencia de los maltratos referidos. Antes, aunque mataran al animal, se calculaba cuánto costaba y se le daba el dinero al tutor», indica la también coordinadora del Seminario de Bioética de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia al respecto de cómo ha avanzado la legislación.
Por ejemplo, la Constitución Política de la Ciudad de México, en su artículo 13, señala que se reconoce a los animales como seres sintientes y, por lo tanto, deben recibir un trato digno. Menciona, además, que toda persona tiene el deber ético y obligación jurídica de respetar la vida e integridad de los animales.
Este documento asegura que la ley determinará las medidas de protección de los animales en espectáculos públicos, las conductas prohibidas con objeto de salvaguardarlos y las sanciones aplicables por los actos de crueldad, así como las bases para evitar maltratos en la crianza.
Las reformas al Código Penal local establecen sanciones más severas contra la violencia animal. Quien lesione a un ejemplar puede ser castigado con penas de seis meses a dos años de cárcel y multas, las cuales se elevarán en un 50% si las heridas ponen en peligro su vida y, en caso de que muera, el responsable puede enfrentar un castigo de dos a cuatro años de prisión, además de que se asegurarán todos los animales que pudiera tener bajo su cuidado.
No te quedes callado
Todo caso de maltrato o crueldad debe denunciarse, así como la venta ilegal de especies, los criaderos clandestinos y las peleas entre animales.
En la Ciudad de México existen diferentes canales para hacerlo, entre ellos, el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia; la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa); y la Brigada de Vigilancia Animal, de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
«Cualquier persona puede llevar a cabo la denuncia. Además de las instancias mencionadas, se puede acudir directamente a un Ministerio Público o también a la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial (PAOT)», comparte la especialista Beatriz Vanda Cantón.
En la lucha contra el maltrato animal todos podemos involucrarnos, desde evitar conductas que hagan sentir mal a los ‘peludos’ hasta denunciar cualquier acto de agresión contra ellos. Las mascotas merecen una vida digna, llena de mucho cariño y libre de toda violencia.
Cómo evitar el maltrato
Antes de adoptar considera si tienes la disponibilidad de tiempo, espacio y recursos económicos para brindarle una calidad de vida óptima a la mascota.
Asegurar su bienestar en todo momento: alimentación, descanso, higiene, salud (tanto física como emocional), acondicionamiento y convivencia.
Educar tanto a niños como familiares sobre el trato y cuidado que se les debe dar a los animalitos. Predicar con el ejemplo siempre será la acción más efectiva.
Obligaciones del tutor
Vacunarlos y desparasitarlos.
Brindar una alimentación adecuada en cantidad y calidad.
Siempre tenerles agua limpia en su traste.
Ofrecer un espacio adecuado para su desarrollo y descanso.
Darle afecto todos los días.
Proporcionarles asistencia médica ante un accidente o enfermedad.
Cuidar su reproducción controlada.
Colocarles una placa con un número de contacto en caso de extravío.
FUENTE: informador